La Asociación Mundial de Gas Licuado de Petróleo (WLPGA) señala que el gas licuado de petróleo (GLP) es una fuente energética transportable, limpia y eficiente de disponibilidad inmediata para los consumidores.

Estas características han convertido al combustible en pilar fundamental de la matriz energética de América Latina y el Caribe.

La variada topografía de la región y su vasta población rural muchas veces han obstaculizado la instalación de infraestructura de ductos de transporte, ya que los costos son prohibitivos y los plazos de despliegue, prolongados.

«Suele ser solo un combustible para llegar a islas o comunidades a gran altitud y, en tiempos de emergencia o desastres nacionales, puede ser crucial para la sobrevivencia», agrega WLPGA.

Estadísticas recientes dan cuenta de la sólida presencia del GLP en América Latina y el Caribe, en particular en Argentina, donde la demanda del combustible se elevó 21% en términos interanualesentre enero y noviembre del 2014.

Costa Rica también exhibe una tendencia similar, con un incremento de 7,4% en la demanda de GLP, que en el 2014 llegó a 253.711m3, mientras que el año pasado las ventas de GLP en Brasil subieron 1,26% a 13.276 millones de litros.

En Colombia, la producción de GLP podría incrementarse a 40.000b/d en el 2017, a partir de los 25.000b/d del 2014.

También se ha registrado un repunte en iniciativas públicas y privadas para avanzar en el frente del GLP.

Esta semana el Ministerio de Energía y Minas de Perú y las autoridades y comunidades de la Región Cusco acordaron que un grupo de trabajo técnico defina los planes para construir la planta de GLP de Kepashiato.

El país ya tiene abierta una licitación por el suministro del combustible a la capital Lima y a la vecina ciudad portuaria de Callao.

Rómulo Alfredo Campos Krauer, presidente ejecutivo de la petrolera estatal paraguaya, Petropar, dijo hace poco a BNamericas que estaban modernizando la infraestructura de almacenamiento de GLP como parte del plan corporativo de ingresar a este mercado.

Por otro lado, la WLPGA puso de relieve los esfuerzos de la empresa Switch para ayudar a Haití a adoptar el GLP y abandonar el carbón vegetal, que se emplea en el 95% de los hogares.

Sin embargo, el GLP no es inmune a los problemas del sector, en particular al hurto.

La venta de volúmenes adulterados de gasolina y GLP es práctica generalizada en México, según datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). Este mes los legisladores aprobaron un proyecto de ley que endurece las sanciones por fraudes relacionados con el combustible.

Un mes antes, la Secretaría de Energía (Sener) implementó nuevas normas que obligan a las empresas de transporte a invertir en mantenimiento y equipos en una iniciativa para mejorar la seguridad.

Foto: Esfera de almacenamiento de GLP en Costa Rica. Fuente: Recope.